jueves, 11 de diciembre de 2008

H.Gran Sol 6-2 Cáceres F.S. EN AGUA DE BORRAJAS


6 - 2

H. Gran Sol Montijo: J.Manuel, Montero, Fernando, Iván Liñán, Fco. José, Anselmo, Blas, Capote, Carlos Hugo, Pérez (P.S.).

Cáceres F.S.: Iñaki, Juli, Caki, Fajardo, Javi Pirula, César Marcos, Mariano, Litri, Richi, Chicha, Juande (P.S.).

Árbitros: Pache y Márquez (Badajoz). Amonestaron solamente a Fajardo, por el bando visitante.


En agua de borrajas quedó la intentona del Cáceres F.S. de sacar adelante un partido que se le había puesto cuesta arriba desde los primeros compases una vez más. Muy mal pintaban las cosas mediado el segundo tiempo para los cacereños: tres goles abajo contra el equipo menos goleado de la categoría, poca fluidez en ataque, fallos defensivos infantiles... un cúmulo de cosas que hasta los jugadores veían insalvables. Hasta que la casta salió a relucir, el Cáceres metió su primer gol, y una nube de optimismo y euforia comenzó a correr por las venas de sus futbolistas. Un arreón en toda regla, la mayor reacción que, en mi opinión, se ha podido ver en toda la temporada en las filas blanquiverdes. Buen juego, mucho toque y búsqueda de espacios que tan sólo tres minutos antes no se veían ni aunque el pabellón hubiera estado vacío. Chapó por los cacereños, que observaban extasiados la cara de angustia y agobio que estaban empezando a enseñar los montijanos. Pero de repente, todo se vino abajo. Un fallo en la marca cuando presionaba asfixiantemente arriba la salida de presión local, permitió a los Hoteleros coger aire, mucho aire. Los visitantes se vinieron abajo, y enseñaron su peor cara. La de un equipo hundido, que no posee confianza y en el que la química entre sus jugadores deja mucho que desear. La cosa pintaba bastante bien, de muchos colorines, y al final todo acabó teñido de negro.

Con el pitido inicial, los dos equipos mostraron que iba a ser un partido de ocasiones al contragolpe. Ambos esperando en media cancha y tanteándose para poder lanzar el primer golpe. Periodo bastante soso hasta el minuto 5 aproximadamente, en el que de nuevo una pérdida cacereña en media cancha permite al Gran Sol organizar la contra y anotar su primer gol a puerta vacía en un dos contra uno. A partir de aquí, el Cáceres comienza a gozar de buenas ocasiones, pero el portero local en algunas, y los defensores, muy rápidos y atentos al cruce en otras, desbaratan cualquier posibilidad. Gran Sol también llega, pero sin demasiada puntería. Primer tiempo bastante soso y de gran desgaste para ambos equipos como se puede apreciar. La ansiedad de los cacereños por empatar el partido provocaba que se cometieran algunas faltas innecesarias. Le costó caro al Cáceres, porque a menos de un minuto para el final, los árbitros decretaban el primer doble penalti, que detenía el portero visitante. Y a tan sólo cinco segundos para el descanso, diez después del primero, se señalaba el segundo, que esta vez sí transformaría el Montijo. 2-0 y al descanso.

Caras largas a la salida de vestuarios en el grupo cacereño, y nada más salir al campo, en el primer minuto, encajan el 3-0 de nuevo en un remate al segundo palo. Este hecho provocó una discusión en la plantilla visitante entre dos de sus miembros. Las cosas no están saliendo bien y eso se nota a la hora de sacar a relucir los nervios. Parece que este cabreo colectivo enrabietó a los blanquiverdes, que a partir de ese momento comenzaron a tratar el balón, a ensanchar el campo y a mover rápido el esférico. Tras un par de buenas ocasiones, el trabajo dio sus frutos y Richi, que hasta ese momento había estado desaparecido pero que cuajó muy buenos diez minutos durante esta reacción, recortó distancias. Tan sólo un minuto después y sin tiempo para los montijanos a reaccionar otra muy buena jugada la culmina Caki tras un pase de la muerte de Richi. Enormes minutos de juego cacereños, que transmitían muy buenas sensaciones. Estoy seguro de que la mayoría de los espectadores de la grada estaban convencidos de que iba a llegar el empate. Las ocasiones se sucedían y el portero local no daba a basto, muy acertado por cierto. Sin embargo, como antes he comentado, un error en el marcaje durante la salida de presión local, deja con todo el campo libre al pívot montijano, que recibe un pase largo y en un movimiento rapidísimo a la media vuelta, pica ligeramente el balón ante la salida del portero y establece el 4-2. Fue el final del partido para los capitalinos. Deciden apostar por el portero jugador hasta la bocina, recibiendo dos goles más. Con los visitantes completamente desmoralizados y los locales crecidos, defendiendo con ganas y fuerza, finaliza el partido.

6-2 final y cuarta derrota consecutiva para los cacereños, que definitivamente ven como sus esperanzas de estar toda la temporada luchando por los puestos altos queda ya muy lejos. No obstante, y aunque ahora todo se ve muy negro, me gustaría decir que no es igual de bonito luchar por ascender que luchar por quedar 5º evidentemente, pero ambos son objetivos igual de honestos, igual de emocionantes si te planteas como reto el subir de la 11º posición hasta la 4º o la 5º. Es mi pensamiento, sé que la gente normalmente no piensa como yo, pero de verdad que me duele en el alma ver cómo a mitad de temporada la gente piensa que no se puede hacer nada. ¡Claro que se puede! Y ahora mucho más ya que no hay presión ninguna por no fallar. Desde luego por mi parte quiero que quede bien claro que ánimos y fe no van a faltar nunca, ni por supuesto la mejor de mis sonrisas. Somos un equipo admirado por mucha gente, no se nos olvide, y por ello debemos corresponder a esa confianza como tal, como equipo. Un saludo para todos mis compañeros, sobre todo para Chicha, que últimamente hemos tenido nuestros más y nuestros menos, y sé que está fastidiado porque el motor no acaba de arrancar. Es un momento duro para todos, pero yo igual que él pienso que esto va a salir adelante sin duda. ¡VAMOS CHAVALES!

CÁ-CE-RES!!!

No hay comentarios: