A.D. Arroyo 3-1 Cáceres F.S. EL OFICIO SE IMPONE AL TOQUE

Serio resbalón el sufrido por el Cáceres F.S. en la preciosa mañana de ayer, domingo, en el Pabellón Municipal de Arroyo de la Luz. Toda la semana avisando, no hay que confiarse, demasiada euforia, vamos paso a paso... y al final la A.D. Arroyo se quedo con los 3 puntos. Partido muy movido, con muchas ocasiones serias de gol, pero con poca o nula puntería por un bando y mucha efectividad por el otro. Ahí va la disección del encuentro:

El partido comienza como se esperaba, el Arroyo encerrado atrás, y a dejar tocar a los blanquiverdes (ayer nuevamente de rojo, pues las equipaciones se siguen retrasando), que aceptan con ganas el desafío. Un par de buenas paralelas, y las dos primeras ocasiones claras de gol para los visitantes, que se encarga de desbaratar el portero local (enormes los dos locales ayer, por cierto). Los cinco primeros minutos son de dominio aplastante del Cáceres con el Arroyo muy bien situado atrás. Sin embargo, los arroyanos parece que despiertan pasado este tiempo, y disponen de dos claras ocasiones en la misma jugada, encontrando el balón la madera en ambas. Todavía con el susto en el cuerpo, el Cáceres parece que vuelve a tener el dominio, pero un gran fallo en el ataque capitalino, es aprovechado por Pablo, que corre el contraataque como un galgo, y engaña al portero colocándole el balón por el primer palo cuando éste esperaba el pase al segundo. 1-0 y el Arroyo sacaba petróleo de su táctica. Ya tenía el partido donde quería. El resto del primer tiempo, el Cáceres tocaba y tocaba, llegando, rozando el gol, pero unas veces el portero local y otras la defensa en su apoyo, impedían el empate visitante. Los azulones, siempre creando peligro a la contra, no encontraban puerta sin embargo. Así se llego al descanso. El entrenador cacereño, Pototo, fue expulsado en la entrada a vestuarios por protestar airadamente una falta bastante clara que hubiera supuesto el doble penalti para los blanquiverdes.

En la reanudación, más de lo mismo, pero con la diferencia de que el tiempo iba en detrimento de los cacereños. El Arroyo, con mucha confianza, no quería dejar escapar tan buena oportunidad que se le presentaba para salir de abajo. Los visitantes, tuvieron dos ocasiones pintiparadas para establecer el empate, una de Tommy que detiene el portero lanzándose como un gato, y otra de Caki, que con la portería vacía, manda el balón a las vigas del techo. Y como el que perdona lo paga, el Arroyo, en su primera ocasión del segundo periodo, corre la contra, en el uno para uno contra el portero, éste detiene, pero el balón le vuelve a caer al atacante, que levantándose desde el suelo, pica ligeramente el esférico, lo suficiente como para que los defensores cacereños no lleguen a él, y aumenta la brecha en el marcador. Además del gol, la jugada le sale cara al equipo visitante, 3 faltas acumuladas, gol y 16 minutos restantes. 2-0, mazazo, y caras largas en el banquillo capitalino. Tan sólo dos minutos después, el árbitro pita la 5º falta a los visitantes, más malas noticias. Tras otro par de buenas ocasiones del Cáceres, y quedando ocho minutos, optan por la táctica del portero-jugador, sin prisa, tocando y moviendo, crean situaciones perfectas con definiciones horrorosas, desesperándose cada vez más. Y en uno de esos fallos, el balón queda muerto en el área arroyana, y Caki, muy luchador como siempre, se adelanta al defensa y mete la punterita para recortar distancias. Doscientas ocasiones clarísimas, y al final se mete el gol más inesperado de todos. Quedaba mucho tiempo, y el Cáceres sigue con la táctica del portero-jugador. Pero no hay suerte, no es el día. Incluso Fajardo dispone de un doble penalti para empatar, pero estrella el balón en la cruceta. Poco después, el Arroyo falla también un doble, que pega en el palo derecho del portero y sale fuera. Con los cacereños nerviosos, porque el balón no entra y porque queda poco tiempo ya, el arbitro concede otro doble al Arroyo, con apenas un minuto por jugar, que esta vez no desaprovecha; de nuevo pega en el mismo sitio, el palo, pero ésta vez, el balón atraviesa la línea. Poco más se puede decir ya, con el Cáceres intentándolo en ese minuto, pero con la pólvora totalmente mojada. Final del partido, y de nuevo desolación en el bando blanquiverde, que contrasta con la euforia de los arroyanos.

Nuestra más sincera enhorabuena a los azulones, y a su entrenador, Rata, por el carácter que imprime al equipo, y porque a todos nos gusta ver que todo un histórico como la A.D Arroyo sale adelante; lástima que empiecen con nosotros...jaja. Un abrazo para todos ellos, porque con toda sinceridad nos sentimos muy bien tratados. ¡¡¡¡Desearles infinita suerte!!!!

Y bueno, por nuestra parte, falta de entrega no se puede reprochar; ayer simplemente el balón no quiso entrar, y eso es algo que ni el mejor equipo puede arreglar cuando le pasa. A seguir luchando y a animar esas caras, ¡¡¡¡que esta semana toca despegar!!!! Un saludo a todos!!!!

CÁ-CE-RES!!!