Última parada. Peldaño final para llegar a puerto, para coronar el alto, para alcanzar el cielo. El Cáceres F.S. se enfrenta al día más importante de su corta historia, la jornada que le puede permitir ganar el Campeonato, dos temporadas después de su fundación. La estación, el Pabellón Mpal. de Moraleja; el revisor, la A.D. Ind. Caurienses; otro histórico del fútbol sala extremeño, que seguro será un escollo durísimo para los blanquiverdes. Tras la agitada jornada 29º, los cacereños lideran la tabla con 2 puntos de ventaja sobre Malpartida y Torrejoncillo, ambos todavía con oportunidad de auparse con la 1º plaza, y que visitarán respectivamente a Zorita y Gran Casar. Las cuentas, impepinables. Si el Cáceres gana, será campeón. Cualquier otro resultado, puede dinamitar las opciones capitalinas, a la vez que vuelve a dar vida a los perseguidores.
Caurienses, equipo siempre peligroso y de juego vistoso, ha visto cómo esta segunda vuelta, las cosas se empezaron a torcer desde el principio. Conjunto temible en su feudo, donde en la primera mitad de la liga consiguió pleno de victorias, ha experimentado un notable bajón, que de no ser por los abandonos de Alburquerque y Alcuéscar, quizás les hubiera podido meter en un serio lío. Aún así, los de la Ciudad de Coria se caracterizan por dar la talla en los grandes envites y plantar cara hasta el final. Para más inri, hemos de recordar que el Cáceres F.S. todavía no ha ganado en la localidad del Alagón, ya que el año pasado salieron goleados por un contundente 8-2. Esperemos que este año, el aliciente que presenta esta última jornada, sirva para voltear las tornas.
Con la experiencia de muchos de sus jugadores de los sucedido hace dos años en Malpartida (donde el Casar perdió la liga en el último minuto), el Cáceres se presenta al encuentro con mucha ilusión, con la humildad de saber que hay que ir pasito a pasito, que todavía no se ha logrado nada, y que seguro (no nos cabe ninguna duda), Independientes va a hacer sudar tinta a los jugadores blanquiverdes. Si hay algo que hace bonito sobre todo este deporte, es que hasta el último segundo, no hay nunca nada dicho, por lo que los célticos deberán mantener la cabeza bien fría y concentrada hasta el pitido final. Esperamos que éste, sí que sea el día más grande de la historia del Cáceres F.S.
Para el encuentro de hoy, los blanquiverdes sólo cuentan con la baja de César Marcos, por motivos laborales, y de Juande, por lesión. La plantilla casi al completo viajará hasta Moraleja, para disfrutar de estos últimos 40 minutos de vértigo, de pasión, de ilusión, de satisfacción y sobre todo, de orgullo, el orgullo que todos los que formamos la familia del Cáceres F.S. debemos sentir, nunca nadie nos ha regalado nada, ¿por qué no seguir tocando el cielo?
Buenas tardes, y ¡buena suerte!
CÁ-CE-RES!!!
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